Una muy grata sorpresa es la que ofrece River Café en la temporada de verano, con su menú especial Por amor al ajo y al mango, una exquisita combinación de sabores contrastantes que son una verdadera delicia para el paladar.
Los platillos sencillos y bien preparados permiten disfrutar de cada uno de los ingredientes del menú, conformado por un aperitivo, dos entradas, tres platos fuertes y dos postres, para hacer una combinación de sabores por demás deliciosa.
Para iniciar esta experiencia, el aperitivo con que se recibe al comensal es un ajo confitado y chutney de mango con chile de árbol servido con crostini natural, una presentación sencilla que anuncia el contraste de sabores que se experimentará durante todo el ágape.
El entorno natural que se puede disfrutar en River Café, con su exuberante naturaleza, el río Cuale y su primoroso murmullo, así como la tenue luz en armonía perfecta con la música de fondo, crean un ambiente íntimo ideal para disfrutar los platillos, haciendo una experiencia completa para los sentidos.
Las entradas, que pueden ser ensalada de camarones con mango al comino, la cual es una excelente muestra de creatividad en cuanto a la combinación de sabores; o la sopa de doble ajo con papa y alioli de chipotle cuya textura y equilibrio son deliciosos, hacen una composición que se complementa idealmente con el pan que se prepara en River Café.
La presentación de los platillos fuertes son un regalo para la vista, delicadamente decorados con ese toque de sencillez y armonía, dejan en el comensal un placer culposo al momento de probarlos, como es el caso de las brochetas de mar y tierra, conformadas por filetes de res, camarón, verduras puré de papa y mantequilla al ajo; o el penne al ajo, en el que la pasta con el ajo rostizado, panceta y chicharos con salsa cremosa de ajo, son una primorosa mezcla de texturas que dejan una grata sensación en el paladar; y qué decir de la pechuga de pollo a la parrilla, en adobo sobre quinoa con vegetales y mermelada de mango y menta, mezcla de aromas y olores que dejan una fresca sensación al gusto.
Para cerrar la experiencia culinaria se presentan otras dos delicias de postres, el mango fresco glaseado con brandy sobre helado de vainilla, y el mousse de mango y coco, ambas alternativas le dan un fino descanso al gusto, y complementando la experiencia gastronómica.
Es de destacar que las porciones son más que apropiadas, bien equilibradas para llegar al final con una grata sensación de satisfacción que puede o no, complementarse con una bebida para disfrutar la exquisita atmósfera de River Café, en la que el buen gusto predomina, dando oportunidad al comensal de admirar, y si quiere adquirir, la vasta colección de obras de arte que se pueden apreciar a lo largo y ancho del restaurante.